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Psicología general

Por qué es importante acudir a terapia para trabajar tus emociones

Es imposible entender quiénes somos si excluimos de la ecuación a las emociones. Pero, ¿te influyen o te dominan? La terapia psicológica te ayuda precisamente a eso, a gestionar tus sentimientos y manejar tus reacciones emocionales.

Inteligencia emocional y coeficiente intelectual

Fíjate en un detalle que me parece interesante para enfocar este asunto de la importancia de la terapia psicológica para trabajar las emociones. Me refiero al concepto de inteligencia y al valor que todos le damos a esta capacidad.

De forma genérica, la inteligencia es la habilidad mental que nos permite identificar, analizar y resolver problemas. Es una herramienta esencial, sin duda, para adaptarnos a los cambios y superar dificultades, para seguir evolucionando individualmente y como especie.

Hasta hace unos años, básicamente, al hablar de inteligencia nos ocupábamos de la parte cognitiva, lo que se denomina técnicamente Coeficiente Intelectual (CI). ¿Quizá por qué es medible mediante unas pruebas y test estandarizados? Así resulta más fácil establecer niveles y ubicar a cada persona según sus resultados. No quiero obviar que es una ayuda, por ejemplo, para que los educadores proporcionen apoyos específicos a los niños, tanto a los que presentan deficiencias, como a los identificados con altas capacidades.

Afortunadamente, en los últimos tiempos, esta capacidad de desenvolvernos en la vida no se entiende sin incluir el papel de la Inteligencia Emocional. Aquí es donde entra en juego la terapia psicológica. Y es que, igual que el CI tiene una parte innata y otra que se puede mejorar mediante el aprendizaje, la terapia psicológica trabaja la parte emocional.

Mitos sobre la terapia psicológica

He intentado explicarte que los terapeutas no solo somos un recurso disponible para tratar problemas de salud mental o emocional. Por supuesto, estamos ahí para ayudar a las personas que tienen la sensación de haber tocado fondo y a las que presentan algún trastorno mental.

Pero, la terapia psicológica es mucho más. Es una herramienta a la que todos podemos recurrir, simplemente, para tener otro enfoque que ayude a entender la complejidad del mundo de las emociones y cómo poder aprovechar todo su potencial.

Sin embargo, hay un halo de desconocimiento general sobre lo que realmente es la terapia psicológica. Y, probablemente, explica en gran medida ese distanciamiento, ese “conmigo no va”. ¿Te parece que desmontemos juntos algunos mitos sobre la terapia como primer paso de acercamiento a su verdadera función?

1. Ni diván, ni relojes pendulares

Es una imagen muy explotada en películas y series. Ese paciente tumbado en un diván al que el terapeuta somete a un exhaustivo interrogatorio para descubrir escondidos traumas infantiles. Probablemente, el origen de esta idea está en la etapa inicial de aparición del psicoanálisis.

Te puedo asegurar que una sesión psicológica actual es mucho más cercana. Por supuesto, intentamos que te sientas cómodo, creando espacios agradables y relajantes. Pero, alejados de imposiciones y situaciones envaradas.

2. El papel del terapeuta es resolver tus problemas

La terapia psicológica no es una pastilla o un medicamento que te tomas y se solucionan todas tus dudas y problemas.

Nuestro papel no es darte las respuestas, sino proporcionarte herramientas para que seas tú mismo quien encuentre la forma más eficaz de solventar sus dificultades.

3. Toda terapia pasa por remover tus recuerdos

Es verdad que hay determinadas terapias que trabajan sobre las experiencias pasadas y patrones de aprendizaje, para encontrar el origen de tus conductas actuales. Es el caso, por ejemplo, de la Terapia Cognitivo Conductual o la Hipnosis.

Sin embargo, hay toda una corriente de terapias que se focalizan en el presente, las denominadas Terapias de Tercera Generación o de Aceptación, enfocadas en mejorar tu bienestar trabajando sobre el presente.

¿Por qué acudir a una terapia psicológica?

Las emociones son parte esencial de nosotros y el mecanismo natural que nos permite manejarnos con la realidad externa y nuestro propio interior. Pero, no siempre es fácil entender lo que sentimos y, sobre todo, mantener cierto control sobre nuestra emotividad para que no nos domine.

Este es el principal argumento que explica la importancia de poder acudir a un terapeuta, que te ayude a gestionar tu faceta emocional. Y lo hace trabajando sobre aspectos tan interesantes como estos.

1. Te ofrece otras perspectivas de enfoque

A veces, acabamos cayendo en un estado de ansiedad porque somos incapaces de salir de un círculo vicioso de estímulo-respuesta. Quizá, lo que necesitas es introducir un cambio en alguno de los factores de la ecuación.

Ejemplo: Siempre has reaccionado con un enfado cuando tu pareja se escaquea de ir a la compra y no consigues nada. ¿Por qué no pruebas a plantear un extra que haga atractiva esa actividad, como tener preparada su comida preferida cuando vuelva? Es evidente que lo ideal es que cada uno se haga responsable de las distintas tareas domésticas. Pero, a veces, coger un desvío es la fórmula para llegar al destino buscado.

2. Profundizas en tu autoconocimiento

Imposible que te establezcas relaciones saludables con otros y que evoluciones, si no sabes quién eres. La terapia psicológica te permite conocerte mejor, aceptarte como eres y, desde ahí, plantear las mejoras o cambios que te apetezca o consideres más necesarios.

Ejemplo: Tienes la costumbre de responsabilizarte y sentirte culpable de cualquier error que se produzca en tu equipo de trabajo. Puede que sea el momento de analizar si te falta capacidad de delegar.

3. Te ayuda a priorizar

¿Quién se libra de vivir inmerso en una vorágine de actividades sin fin? Al final, parece más importante hacer mucho y estar en todas partes. Sin embargo, ¿qué estás disfrutando de verdad? A lo mejor es el momento de empezar a elegir, de volver al “menos es más”.

Ejemplo: Llevas tiempo quedando todos los viernes a cenar con tus amigos. Pero, llegas tan agotado de toda la semana, que en lo único que piensas es en el momento de pagar la cuenta e irte a casa. Es probable que un pequeño cambio, como alternar un viernes de cena y uno de descanso sean lo que necesitabas para disfrutar ambas situaciones, de tus amigos y del relax.

Te animo a comprobar por ti mismo qué es la terapia psicológica y cómo puede ayudarte en tu día a día. Mi disponibilidad y la de mi equipo están tan cerca como necesites.

Psicóloga colegiada B-01444. Especialista en Terapias de Tercera Generación. Terapia de Aceptación y Compromiso. Terapia Cognitivo Conductual y Neurociencias. Acreditada como Hipnoterapeuta clínico Experto en Psicosomática.

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